Ante las diferentes explicaciones de la crisis, Félix Ovejero considera que no son adecuadas las interpretaciones moralistas (que vienen a decir que se han excedido los que persiguen su propio interés), ni las de la economía racionalista (que vienen a decir que los actores económicos actúan movidos racionalmente para alcanzar su interés). En uno y otro caso se estaría apelando al mejor de los mundos posibles para terminar con la nostalgia de que todo habría podido ser de otra manera. Por el contrario, Ovejero defiende la tesis de que es un hecho que los seres humanos persiguen su interés y que no siempre actúan racionalmente; por lo que, para evitar que pasen las cosas que pasan (las crisis), lejos de pretender cambiar el mencionado factum, convendría cambiar lo que está en nuestra mano cambiar; esto es, las instituciones.
Esta reflexión de Ovejero me ha recordado el análisis de José Ignacio Torreblanca cuando precisaba que, ante la disyuntiva de elegir entre "ángeles o demonios", "los fundadores de EEUU no lo dudaron: demonios. Por ello, a la hora de diseñar su sistema constitucional partieron del supuesto de que cualquiera que ocupara una posición de poder tendería a abusar de él. Así, aun a riesgo de generar bloqueos y dificultades a la hora de gobernar, optaron por dividir el poder [...]."
Así pues, tal vez convendría rediseñar buena parte de las instituciones para eliminar de las mismas todo el "angelismo" que pueda estar presente en ellas.
Ovejero Lucas, Félix. "Los moralistas, los economistas y sus abuelas". El País, 04/06/2010, Opinión, página 33.
Torreblanca, José Ignacio. "Ángeles y demonios". El País, 12/04/2010, Internacional, página 8.
Esta reflexión de Ovejero me ha recordado el análisis de José Ignacio Torreblanca cuando precisaba que, ante la disyuntiva de elegir entre "ángeles o demonios", "los fundadores de EEUU no lo dudaron: demonios. Por ello, a la hora de diseñar su sistema constitucional partieron del supuesto de que cualquiera que ocupara una posición de poder tendería a abusar de él. Así, aun a riesgo de generar bloqueos y dificultades a la hora de gobernar, optaron por dividir el poder [...]."
Así pues, tal vez convendría rediseñar buena parte de las instituciones para eliminar de las mismas todo el "angelismo" que pueda estar presente en ellas.
Ovejero Lucas, Félix. "Los moralistas, los economistas y sus abuelas". El País, 04/06/2010, Opinión, página 33.
Torreblanca, José Ignacio. "Ángeles y demonios". El País, 12/04/2010, Internacional, página 8.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario. En breve será publicado.
Thanks for your comment. It will be published as soon as possible.