Josep M. Colomer considera los siguientes hechos:
- Desde que en 2008 explotara la crisis económica, en los procesos electorales de los Estados de la Unión Europea (UE) dos tercios de los partidos del primer ministro en el cargo han sido sustituidos por un miembro de otro partido, repetidamente con un desplome espectacular del partido hasta entonces en el Gobierno, mientras que durante las seis décadas anteriores la sustitución sólo acontecía en un tercio de los casos. Por lo que las democracias europeas están en dificultades.
- Los Gobiernos estatales sin partido (Italia, Bélgica, Grecia) parecen estar funcionando mejor que los gobiernos de partidos y, por otra parte, la ausencia de un Gobierno de partido apenas tiene impacto en la gobernanza porque se limitan a ejecutar acuerdos previos de la UE relativos a la política fiscal y presupuestaria, y porque hay un entramado de instituciones y organismos no-electos y no-partidarios (administración civil y de justicia) que se basan en procedimientos estandarizados.
- En la actualidad, que en un Estado de la UE gobierne un partido de izquierdas o de derechas no comporta gran diferencia en la práctica, sino que es la UE, o al menos el pequeño grupo dirigente (Consejo Europeo), quien tiene el control. Así la actual crisis financiera y económica está completando la pérdida de soberanía de los Estados. Sin soberanía no hay Estado, y sin Estado no hay democracia estatal. Pero persiste la disfunción de que los decisores a nivel europeo surgen todavía de elecciones a nivel estatal.
A partir de todo ello Colomer concluye lo siguiente:
- Para que perviva la democracia en la UE deberían trasladarse desde el nivel estatal al nivel de la UE la rendición de cuentas y el control de los gobernantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario. En breve será publicado.
Thanks for your comment. It will be published as soon as possible.